Granxa de Esteiro
Esta casa en su día perteneció a la casa de Goyanes, tanto por sus blasones como por la corona marquesal, que está situada en la parte alta del escudo, debajo de los senos de la sirena.
En la época de la casa de Goyanes, los varones solían dedicarse a la carrera militar, como podemos apreciar en sus documentos; las mujeres profesaban en los conventos y las que no seguían de religiosas, salían para casar, normalmente con gentes de otros afamados linajes para mejorar sus posesiones.
Casa en buen estado de conservación y con una serie de dependencias, que nos dice que un día fueron industrias de salazón.
También, como en este caso, tenían negocios relacionados con la pesca y la navegación. Así aparece en 1759 don José de Caamaño y Varela vendiendo un barco, en concreto "El San Pedro y Ánimas, con todos sus aparejos", propiedad de su sobrino don Jorge Caamaño Gayoso.
Por esta época, don Jorge Caamaño, Señor del Coto de Goyanes, tenía una lancha de pesca y una pinaza, a medias con Domingo Romero y Agustino García de Paz de "La Villa del Caramiñal" que dedicaban al comercio con Portugal.
Este don Jorge de Caamaño tenía otra pinaza dedicada al comercio con Portugal, con Ignacio Mariño, en A Pobra do Deán.
Las diversas construcciones instaladas prácticamente sobre el mar, hacen pensar qué trabajarían pescado salado con sus métodos, hasta la llegada de los catalanes con otras técnicas más avanzadas.
Las armas del escudo son las de los Caamaño y las de los Gayoso, que corresponden a é poca del matrimonio formado por don Juan Antonio de Caamaño Varela Mendoza Mariño de Goyanes (1730) casado con doña Ventura Gayoso Arias Lemos Ozores o de su hijo don Vicente de Caamaño Gayoso casado con doña María Josefa Pardo Xupeiro.
Poco más sabemos de sus vicisitudes, pero sí, que posteriormente pasó a las manos de los Barxes, con salazones en esta zona, concretamente la dueña Luisa Vila, y luego a los Domínguez y a los Carrero.
Damos una pequeña descripción de los Carrero: Matrimonio formado por Marcelino Carrero Mascato, de Cambados, hijo de Manuel Carrero y de Manuela Mascato y Martí, casado con Carmen Gelpi Roura, de Cabo de Cruz. Una hija de estos señores, doña Petronila Carrero Gelpi, casaría con don Enrique del Rio Ferrer, que a su vez era hijo de don Andrés H. del Rio González, de Palmera (+23-V-1813), casado (6-VII-1835) con doña Josefa Ferrer Casellas, de A Pobra do Caramiñal. Larga es la genealogía de estas familias.
Diremos que en esta casa, aparte de ser fomentadores, así conocidos porque trataban en el pescado salado, el entronque de la familia del Río y Carrero dio lugar a la formación de una de las compañías navieras más importantes del momento. Recordemos los nombres de barcos como el bricbarca "María Luísa" o el "Buenaventura" y los bergantines "Los hermanos", "Cabiaces" y "Alina", este último relacionado con el comercio de Tabacos y como no el "María Asumpta" construido en 1855, y que terminó sus días naufragando en 1955.
Posteriormente esta casa la compraron los señores del Rio Chico, de Santiago, y en la actualidad pertenece a los familiares de la familia del Rio del Busto.
Casa de Gabino Dieste
En su día perteneció a un clérigo. En tiempos más recientes pasó a Emiliano Dieste Riveiro, casado con Eugenia Vázquez Torrado y luego a su hijo Gabino Dieste Vázquez, casado con Flora Fernández Outeiral.
Según referencias, este escudo era el que tomaba como símbolo, en siglos pasados la "COFRADÍA DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO" de la parroquia de Abanqueiro (Boiro).
En él apreciará un cáliz con la hostia superpuesta, dos llaves cruzadas por la parte posterior y, sobre él, un bonete, que hasta hace pocos años usaban los curas como prenda de vestir secundaria.
Entran dudas de si, en vez de un bonete pudiera tratarse de una pequeña corona, ya que, si así fuera, estaríamos ante un ESCUDO DE GALICIA que, al estar en solitario, sería uno de los poquísimos que se conociesen.
Correspondería a la época de finales del siglo XVI, ya que desde el siglo XII al XIV el Reino de Galicia careció de símbolo heráldico. Galicia estaba integrada en la monarquía Leonesa de Castilla (claro ejemplo lo tenemos en casa de A TENENCIA, en Boiro, donde hay una variante del escudo de Castilla y Leon y las torres fueron substituidas por la mano alada armada). Cuando Galicia se dotó de simbología propia, se buscó este símbolo religioso que, primero, fue un cáliz tapado, y luego destapado, tal es el caso que nos ocupa; y después, sería la custodia.
La razón de este símbolo eucarístico, en las armas de Galicia, está basada en un antiguo privilegio de la Catedral Lucense: la exposición permanente del Santísimo Sacramento a los fieles.